El bypass gástrico Roux-en-Y (RYGB), comúnmente llamado simplemente “bypass gástrico”, es uno de los procedimientos bariátricos más populares en todo el mundo y ha sido considerado el “estándar de oro” de la cirugía bariátrica. El bypass gástrico se resalizó por primera vez en 1967 y se realizó como cirugía abierta durante varias décadas. Sin embargo, hoy en día, se realiza mediante laparoscopia.
El procedimiento quirúrgico consiste en dividir el estómago en dos cámaras. La cámara superior o reservorio es muy pequeña (aproximadamente 30 ce) y recibe la comida. La cámara inferior queda excluida y no recibe alimentos. El intestino delgado se divide y un extremo se conecta o anastomosa al reservorio gástrico. Se realiza una segunda conexión
(“anastomosis”) para conectar el estómago y el duodeno excluidos al intestino delgado. Esta conexión permite que los líquidos digestivos se encuentren con los alimentos ingeridos para permitir el procesado y absorción de nutrientes. La distancia entre las dos conexiones puede variar, pero generalmente es de 50 a 150 cm.
La manga gástrica es una intervención ampliamente testada en el campo de la cirugía bariátrica, que extirpa aproximadamente el 75% del estómago, convirtiéndolo en una estructura tubular que consigue restringir la ingesta de comida.
La manga gástrica generalmente produce una pérdida de peso corporal del 25% al 35% (pérdida de exceso de peso del 50 al 70%) desde el inicio, y la mayor parte de la pérdida de peso ocurre en los primeros 6 meses. La pérdida de peso sustancial suele conducir a una importante mejora e incluso a la remisión completa de muchas de las comorbilidades relacionadas con la obesidad, incluida la diabetes tipo 2. La manga gástrica laparoscópica se ha convertido rápidamente en una de las cirugías bariátricas más comúnmente realizadas y se encuentra en la posición intermedia entre los otros dos procedimientos bariátricos, la banda gástrica ajustable laparoscópica y el bypass gástrico laparoscópico, en términos de riesgo quirúrgico, pérdida de peso y resolución de la obesidad.
La manga gástrica presenta ventajas sobre el bypass gástrico, siendo un procedimiento más simple y seguro. Produce menos deficiencias de vitaminas y micronutrientes que los procediemintos con componente de malabsorción, como el bypass. Otras ventajas importantes de la manga gástrica en comparación con el bypass gástrico son la falta de síndrome de dumping y la prevención del riesgo de cáncer gástrico que surge del estómago remanente excluido. Como todas las técnicas, también presenta inconvenientes, aunque en un porcentaje muy bajo, como la posibilidad de una fuga postoperatoria o la aparición de reflujo, que suele controlarse con tratamiento médico.